A pesar de los malos augurios sobre la climatología del sábado (01/11/08), María y yo fuimos los únicos que nos animamos a buscar tesoros por la Pedriza.
El día amaneció gris, pero en ningún momento sentimos amenaza de lluvia y aunque algo fresco, pudimos disfrutar de los tesoros. Hay que decir que el objetivo era encontrarlos y aprender a utilizar bien el gps... Objetivo cumplido.
Por tiempo, solo pudimos encontrar 2 de los 3 que teníamos planificados. Que mejor excusa que dejar algo para volver otro día.
El primer premio llego con el Cáliz. Una formación rocosa bastante curiosa y muy típica de la Pedriza y la erosión que sufren sus cumbres. Nos costó un poco, ya que el objetivo del caché era recuperar una antigua vereda.
En este caso tesoro, dejamos una autentica reliquia: un cococrash!!
Después y tras la correspondiente anotación de nuestra llegada en el libro de visitas, fuimos en búsqueda del cache escondido en el Collado del Cabrón.
María, haciendo un alarde orientación campo a través con el GPS , y yo haciendo trampas con la foto del Spoiler, conseguimos llegar al cache en tiempo record.
